Para captar y retener tu atención lo antes posible, voy a comenzar por el final:

A través del mundo digital en general, y el desarrollo Web en particular, puedes encontrar un medio para lograr la vida que quieres.

En este artículo te explicaré el porqué y, en el caso de que consiga convencerte, cuáles deben ser tus primeros pasos.

Pero antes quiero ponerte en situación.

Tras unos cuantos años dando clase, en contacto con alumnos de casi todos los trasfondos, no deja de fascinarme el camino que todos ellos recorren al dar sus primeros pasos en el mundo del desarrollo interactivo. Una historia que siempre se repite: el viaje de la desesperación a la ilusión.

Estoy seguro de que no es un viaje único de esta profesión. Lo cual quiere decir que para adquirir cualquier habilidad que merezca la pena, hace falta esfuerzo y dedicación contínua, sobre todo al principio.

Compromiso con el aprendizaje

Si quieres dar el primer paso, lo primero que debes saber es que la profesión de desarrollador/a Web es dura, pero cualquiera con el interés suficiente puede aprenderla.

Lo segundo que debes tener en cuenta, es la clave de todo este asunto: el compromiso con el aprendizaje contínuo, el cual tienes que hacer y mantener.

¿Por qué?. Porque la Web como plataforma —el lugar donde vas a trabajar— evoluciona constantemente, hay nuevas herramientas, funciones y características cada día. Tú, como profesional, tienes la obligación de estar al tanto de todas ellas.

La buena noticia es que basta con organizarse (aquí también te puedo ayudar) y dedicar de treinta minutos a una hora al día, además de ser constante, para que puedas sentirte a gusto en este medio.

No te voy a engañar, al principio será difícil ya que se trata de muchos conceptos nuevos. Pero, poco a poco —te lo garantizo— irás encontrando patrones repetidos y conceptos que se parecen entre sí, haciendo más sencillo todo el proceso.

La clave, como en todo, es perseverar.

Comodización

Gran parte de la culpa de que el desarrollo Web sea tan interesante como profesión, es la enorme cantidad de oportunidades profesionales que existen. Las hay de todo tipo y para todos los niveles.

¿Por qué hay tanta demanda de profesionales interactivos?. Porque —como te dije antes— esta profesión es muy dura. La dificultad, sumada a la obligación de aprender cada día, hace de filtro, de barrera de entrada.

Tener que estudiar, aprender y probar constantemente, no es atractivo para la mayoría de las personas. La mayoría huyen de la frustración implícita. Sin embargo la frustración es necesaria.

En esta profesión la frustración y la curiosidad son la puerta a la realización.

Libertad

Si alguna vez has soñado con trabajar desde cualquier lugar y a cualquier hora, esta profesión es para tí. Es cierto que no todas las empresas ofrecen esa libertad de primeras, pero precisamente, las empresas digitales son las que mayor apertura tienen en este aspecto.

Trabajar en remoto —desde donde te de la gana— es muy común en el mundo interactivo.

Muchos de los profesionales digitales reúnen experiencia durante años y dan el paso a trabajar para ellos mismos como profesionales independientes. Es decir, no estás obligado a trabajar para nadie nada más que para tí, si así lo deseas.

No se tú pero cuando pienso en poder trabajar desde donde quiera y para quien quiera, una única palabra me viene a la mente: libertad.

Es posible que te estés preguntando por qué es tan importante esta libertad de la que hablo. ¿Recuerdas que al inicio del artículo te decía que esta profesión es un gran medio para lograr la vida que quieres?. ¿Cómo vas a saber qué quieres en tu vida —y quién eres de verdad, de paso— si no puedes experimentar?.

Ahora dime, ¿qué es lo que hace falta para poder experimentar?. Libertad.

No sabes lo quieres —a nivel íntimo, profundo— en la vida si no has experimentado, viajado y sentido lo que el mundo puede ofrecerte.

Fácil acceso

A pesar de la dificultad de la profesión en sí —tercera vez que lo recuerdo—, para convertirte en profesional interactivo no necesitas más que un ordenador y una conexión a Internet.

Eso es todo.

No te engañes, no son necesarios ordenadores de última generación. Con un portátil de hace cinco años es más que suficiente para comenzar. Si no tienes conectividad puedes utilizar el acceso gratuito WiFi de muchas cafeterías como las que seguro hay donde vives.

Una vez más es cuestión de voluntad. El resto son excusas, si te empeñas en buscarlas, seguro que las encontrarás.

Realización

Antes te hablaba de la frustración y de cómo todos la entendemos como algo negativo. Si quieres dedicarte al desarrollo Web/interactivo/digital (da lo mismo) vas a tener que cambiar tu percepción. No te queda de otra.

La frustración será tu compañera inseparable durante todo tu viaje.

Debes transformar tu frustración en curiosidad. Algo sencillo si entiendes que todo depende de cómo percibes tu propia realidad.

Es normal frustrarse. La gran cantidad de herramientas, tecnologías, terminología y conceptos del mundo del desarrollo digital asusta a los recién llegados.

Lo que es absurdo es rehuir la incomodidad y dejarte por el camino oportunidades de crecimiento profesional. Oportunidades para una vida mejor.

En lugar de disgustarte o sentirte incómodo/a, date cuenta de que es lógico sentirse así, y a todos nos pasa, sin importar la cantidad de años de experiencia. Aprender para darte cuenta de que lo aprendido es sólo es la punta del iceberg, frustra.

Si no abandonas poco a poco irás normalizando la situación y convirtiendo esa frustración en curiosidad por seguir aprendiendo, continuar practicando y convertirte en un mejor profesional.

Primeros pasos

No quiero abrumarte con opciones. No quiero que tengas que elegir. Sólo quiero que digas sí o no.

Asumiendo que no tienes ninguna experiencia en el mundo del desarrollo Web, sólo te voy a pedir dos cosas.

Ahí van:

  1. Busca un momento del día en el que puedas dedicar al menos quince minutos a esta tarea. Intenta, eso sí, que sea siempre a la misma hora.
  2. Estudia el material de este curso sobre HTML y CSS (las bases de la Web) y ponlo en práctica.

Si te comprometes a hacer esto cada día durante al menos un año te prometo que tu vida profesional cambiará a mejor de una forma que ni siquiera eres capaz de imaginar.

Hazme saber cómo te está yendo. Comparte conmigo tus dudas. Puedo y quiero ayudarte, pero eres tú el que tiene que dar el primer paso. Mi correo-e es juan[at]wmedia.es. Estoy a tu disposición. Hablo en serio.

Conclusión

Termino este artículo como lo empecé. Estoy convencido de que si eres constante y no abandonas, a través del desarrollo Web puedes dar un giro de ciento ochenta grados a tu vida profesional.

Tienes el camino a tu libertad frente a tí.

¿Te atreves a dar el primer paso?.